Una desconocida planta
que parece de otro planeta

por Daniel Norero



Quizá hayas visto algo parecido a esta planta en un planeta de alguna película de ciencia ficción, pero en la realidad, crece en la Puna de los Andes de Perú, Bolivia, Chile, y el oeste de Argentina.

La llareta o yareta es bastante sólida cuando ya tiene un volumen considerable, esto se debe a que cuando mueren las flores que se encuentran al final de cada tallito, estas forman una especie de relleno (detritus) dentro del cuerpo del cojín.

La llareta (Azorella compacta) es una planta herbácea muy compacta y resinosa con disposición en cojín (algo así como una coliflor); se encuentra en la división espermatófita (produce semillas) y pertenece a la familia Apiaceae, lo cual la convierte en pariente del apio y el perejil. Además, en la parte reproductiva sus flores son hermafroditas (tienen órganos masculinos y femeninos), así que mediante la acción de insectos se puede auto-polinizar. También se caracteriza por ser una especie longeva y de lento crecimiento, aumentando su tamaño a una tasa promedio de un centímetro por año. Hay algunos ejemplares de hasta 3 mil años de antiguedad como el que incluyó la fotógrafa Rachel Sussman en su inventario de los organismos vegetales más longevos del mundo.





La llareta es altamente resistente al estrés abiótico; por ejemplo, su disposición en cojín le permite modificar las características físicas de su ambiente, reduciendo la velocidad del viento y controlando las diferencias de temperatura. Crece en una altura de 3 a 5 mil metros sobre el nivel del mar, en suelos nutricionalmente pobres y de cualquier medida de pH, así como tiene la capacidad de subsistir en condiciones de sequía, alta temperatura y radiación solar.





Una gran cantidad de ejemplares crecen sujetos a rocas. Via Wikipedia



La poca investigación que se ha llevado a cabo, más allá de su caracterización botánica, apunta a diterpenos que se han aislado desde esta planta, los cuales tendrían potenciales propiedades antiparasitarias, antituberculosas, acción tripanocida contra el mal de Chagas y antihiperglicémica (útil en la diabetes), entre otras.

Personalmente creo que la llareta también presenta un gran potencial para su uso en el ámbito biotecnológico y agrícola. Debido a su alta resistencia a condiciones de sequía, calor y suelos deficientes, es un organismo ideal para usar como modelo de estudio genómico que permita encontrar genes útiles para traspasar mediante ingeniería genética a cultivos alimentarios. Existe tal vez la posibilidad de que esta planta pueda aportar a la producción de cultivos más resistentes, como también a los problemas que el cambio climático ha ido empeorando durante este siglo XXI, como lo son la falta de agua, pérdida de suelos cultivables y temperaturas extremas.



Se puede observar el diminuto tamaño de sus flores. Via Wikipedia



Si revisamos un poco los datos del pasado, uno de los primeros reportes históricos de esta planta herbácea fue llevado a cabo en 1586 por el español Pedro de Mercado Peñaloza en Relaciones Geográficas de Indias, sin embargo, una de las primeras descripciones detalladas (y acompañada de una colección fragmentaria de la planta) pareciera ser la del Capitán Joseph Andrews en 1827. La siguiente persona en proporcionar un ejemplar de llareta fue el botánico y coleccionista chileno, Federico Philippi, quien lo obtuvo durante sus viajes a la frontera Chile-Bolivia en 1885. Esta sería descrita seis años después como Azorella compacta por su padre Rodolfo Armando Philippi.

Por el alto contenido energético de sus resinas este arbusto se usó como combustible durante miles de años por los pueblos altiplánicos, y hasta la actualidad las comunidades la extraen para diversos usos, como leña, obtención de resinas, o como medicina popular para el resfrío, dolores musculares, hiperglicemia, “mal de montaña” o en vendajes de heridas.

Lamentablemente por más de medio siglo sufrió una extracción destructiva en Chile y Perú por los empresarios de los ferrocarriles sumado a la actividad minera y salitrera, quienes la depredaron como combustible, lo cual provocó su desaparición en varias localidades. A mediados del siglo XX su uso se reguló, y por suerte aún quedan ejemplares dispersos.



Referencias:
Ficha de Antecedentes de Especie: Azorella compacta. Ministerio del Medio Ambiente, Chile.
G. E. Wickens. (1995). Llareta (Azorella Compacta, Umbelliferae): A review. Economic Botany. Volume 49 (2), pp 207-212
C. Kleier, P. Rundel. (2009). Energy balance and temperature relations of Azorella compacta, a high-elevation cushion plant of the central Andes. Plant Biology. 11(3): pp 351-358
Areche et al. (2013). Further mulinane diterpenoids from Azorella Compacta. Journal of Pharmacy and Pharmacology. 65 (8): pp 1231-1238
Neira et al. (1998). Activity of Dipernoids isolated from Azorella compacta (Llareta) on Trypanosoma cruzi amastigotes. Boletín Chileno de Parasitología. 53 (1-2): pp 9-13
Fuentes et al. (2005). Experimental antihyperglycemic effect of diterpenoids of llareta Azorella compacta (Umbelliferae) Phil in rats. Phytotherapy Research. 19 (8): pp 713-716
Orlando Muñoz, Marco Montes, Tatiana Wilkomirsky. (1999). Plantas medicinales de uso en Chile: Química y Farmacología. Santiago de Chile: Editorial Universitaria, S.A.




Daniel Norero es estudiante de bioquímica en la Universidad Católica de Chile. Sus intereses a desarrollar en investigación están reacionados con las células madre y los cultivos genéticamente modificados. Pretende además extenderse en lo que es la comuniación de la ciencia y el periodismo científico. Es manager de comunicaciones en la empresa de geomática* y servicio a la minería FPIngeniería. Síguelo en Twitter.


Diseño: Aleszu Bajak

Foto portada: Cody H via Wikipedia.